Está claro que la tecnología y la inteligencia artificial han sabido hacerse de un espacio en todos los ámbitos de la vida, ofreciendo propuestas innovadoras para dar solución a diversas problemáticas. Con ese objetivo, desde hace un tiempo, han volteado la mirada hacia el mundo de las mascotas, encontrando un mercado potencial entre los dueños que desean incrementar la calidad de vida de sus animalitos de compañía y su relación con ellos.
A la tecnología al servicio de las mascotas se le denomina Pet Tech, y se enfoca en proporcionar alternativas para mejorar su cuidado, su salud, su bienestar físico y emocional, y sus momentos de juego. Se expresa en aplicaciones móviles, aparatos inteligentes u objetos wearables –dispositivos que los animales portan todo el tiempo, como un collar o un suéter, para estar monitoreados de forma directa–.
Aunque las mascotas, también, pueden ser ciertos reptiles, peces o aves, la mayoría de la Pet Tech está dirigida a los perros y gatos, y se clasifica en varios tipos según su función:
De comunicación
Pretende dar a entender a los dueños, los sentimientos y emociones de sus mascotas, a través de la identificación de sus sonidos.
Existen varios dispositivos de este tipo; un ejemplo es MeowTalk, una aplicación que interpreta y traduce los maullidos de los gatos, para saber su estado anímico o lo que nos intentan comunicar. Es muy fácil de usar; con el
micrófono del celular, se registra el maullido y, luego, el software lo compara con otros que posee en su base de datos, que están asociados a una posible emoción. Al final, arroja una respuesta o significado, de entre nueve opciones que tiene programadas.
El creador de la app, Javier Sánchez, un exingeniero de Amazon, quien participó en el desarrollo de Alexa, la asistente digital de dicha plataforma, ha dicho que entre más se utilice, más acertada será. Además, entre los planes de actualización, está el convertirla en un wearable, que interprete los maullidos instantáneamente.
Por su parte, la empresa surcoreana Petplus creó un collar con inteligencia artificial, que interpreta los ladridos de los perros y los clasifica en cinco estados de ánimo, con un 90 % de efectividad. Se conecta vía wifi a un teléfono inteligente y, mediante una aplicación, se pueden ver los resultados de las interpretaciones. El análisis se hace al comparar el ladrido con más de 10 mil muestras diferentes, de 50 razas de perros. Así, los dueños podrán saber si su amigo canino se encuentra deprimido, enfermo, alerta o ansioso. Asimismo, funciona como un medidor de la actividad física del perro.
De alimentación
Se trata de aparatos que se encargan de dispensar cierta cantidad de comida cada determinado tiempo. Los hay desde los más sencillos hasta los más sofisticados, que pueden preparar los alimentos y llevar un control nutricional de la mascota, como Kibus, una maquinita que es capaz de cocinar comida deshidratada encapsulada, con la temperatura adecuada, para que pueda ser consumida por el animal, de forma inmediata, al momento de liberarla, sin que se queme. Se conecta con wifi o datos móviles, con el celular, para que el dueño pueda interactuar con la mascota en tiempo real y acceder a su historial de comidas.
PetTrax es un dispensador que se conecta con una aplicación, en la cual el usuario puede llevar el control del peso de su mascota y la cantidad de alimento que ingiere al día. Mide las calorías y emite alertas de cuando el perro o gato está tomando sus alimentos, o bien, si no ha comido o bebido agua durante un período fuera del habitual.
Alvinoo es una especie de fuente, con un filtro purificador, que conserva el agua limpia y a una temperatura adecuada, para el buen funcionamiento gastrointestinal de la mascota. Mantiene el agua en movimiento constante, lo que ayuda a que ésta no se asiente y se formen hongos.
De salud y ejercicio
El objetivo de las Pet Tech de este tipo es monitorear los signos vitales de la mascota, para verificar su buen estado de salud y, en caso de haber alguna anomalía, poder responder rápidamente ante la emergencia.
Dinbeat es una empresa española que creó una pechera para perros y gatos, pensada como un auxiliar de los veterinarios, en la atención sanitaria de los animales hospitalizados o que están bajo observación médica. Al portarla todo el tiempo, monitorea permanentemente su frecuencia cardíaca y respiratoria, su temperatura, etcétera. La información registrada se sube a una base de datos online, a la que el médico puede acceder en cualquier momento, para corroborarla. Asimismo, si se llegara a presentar una variación importante en las constantes vitales, el dispositivo le emite una señal de alerta, para que el paciente canino o felino pueda ser atendido.
Los dispensadores de comida que cuentan con la función de control nutricional, también, pueden incluirse dentro de este rubro de salud. En cuanto a la actividad física, un factor igual de importante en el bienestar integral, existen wearables, como collares o dispositivos que se adaptan a éstos, que registran los hábitos de sueño, los kilómetros caminados o corridos, la quema de calorías y el peso ideal de la mascota.
De rastreo
Una de las primeras formas del Pet Tech –antes de que el concepto se consolidara como tal y de que existiera la variedad de productos actuales– fueron los microchips de geolocalización. Éstos se siguen utilizando hoy en día y se implantan en la nuca de la mascota, para que pueda ser rastreada por su dueño, en caso de robo o extravío. Hasta el momento, es uno de los recursos más confiables, pues, al estar dentro del cuerpo del animal, es casi imposible que se caiga o se lo retiren.
Otra opción son las placas de identificación con QR. Quien encuentre a la mascota perdida puede escanear el código, con su smartphone, para obtener los datos tanto del perro o gato como de su dueño. De forma paralela, éste recibe una notificación cuando alguien ha escaneado dicho código. Dinbeat, Pet Touch ID o la mexicana ID Animal son algunas de las muchas empresas que ofrecen este servicio.
También, hay dispositivos que se adaptan al collar de la mascota, como Tractive, que, además de contar con GPS, incluye una cámara, que permite ver, desde el celular, dónde se encuentra el perro o gato; asimismo, el usuario puede delimitar un perímetro de libre tránsito del animal, y en cuanto el equipo detecte que éste se ha salido de dichos limites, emite una alerta.
De recreación
Su objetivo es elevar los momentos lúdicos al máximo nivel, ofreciéndole a la mascota la posibilidad de divertirse de forma autónoma o a distancia con su dueño. Básicamente, son juguetes inteligentes, que tienen una variedad de funciones. Wicked Ball es una pelota interactiva, que se desliza por el espacio automáticamente; tiene tres modos de juego, que equilibran la actividad y el descanso; es resistente al agua y contra las mordidas.
También, está el Wickedbone, un juguete en forma de hueso, que se conecta vía Bluetooth, con un celular, desde donde se pueden controlar todas sus funciones, como sus estilos de movimiento, la velocidad y su respuesta al tacto.
Para supervisión de las mascotas mientras se quedan solitas en casa, existen aparatos con cámaras de video panorámicas, que permiten vigilar el lugar desde el celular. Algunos tienen pantallas y micrófono, para que el animal pueda ver y escuchar a su dueño e interactuar con él, de forma remota. Asimismo, a través de una aplicación, el usuario es notificado cada que el equipo registre ladridos constantes de su perro, y le permite mandar la orden al aparato, para que libere un premio. PetChatz, Petcube y Furbo son buenas opciones.
Areneros que se limpian solos, platos y camas inteligentes son otros ejemplos más de la gran variedad de la tecnología para mascotas. Aunque, cabe aclarar que, si bien la Pet Tech puede ayudarnos a atender o a entretener a nuestras mascotas en ciertas ocasiones, ésta es sólo un auxiliar, por lo que no debe utilizarse como un sustituto de las responsabilidades que tenemos con nuestros animales de compañía.
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