«Este principio nos enseña cómo volver a entrenar nuestro cerebro para detectar patrones de posibilidad, de modo que podamos ver y aprovechar las oportunidades dondequiera que miremos».
Shawn Achor, The Happiness Advantage
El ingeniero de software Alekséi Pázhitnov, en 1984, diseñó y programó un videojuego simple que tomó al mundo por sorpresa. Obsesionado con los rompecabezas, Pázhitnov imaginó un escenario en el que podría montar varias formas de madera sobre el área de una caja. De tal manera que dichas formas “caerían del cielo”, para ser manipuladas por el jugador, quien tendría que ensamblarlas lo mejor posible dentro de la caja. Así, surgió el videojuego que conocemos hoy como Tetris, el cual, ayudado por el boom que provocó en la industria, se convirtió en uno de los videojuegos favoritos de adolescentes y jóvenes.
Sin embargo, los apasionados de este videojuego se dieron cuenta que, luego de estar jugando por un determinado tiempo, al cerrar los ojos, veían las piezas de Tetris delineadas en la oscuridad. Esta sensación fue denominada como efecto Tetris en 1994, cuando un periodista de la revista cultural Wired trató de demostrar que este videojuego ejercía alteraciones sobre el cerebro. No obstante, existen otras investigaciones más especializadas:
· Según Richard Haier, profesor de neurología pediátrica en la Universidad de California, al jugar Tetris por primera vez, aumentan la función y la actividad cerebral, incrementando el consumo de energía en el cerebro. En cambio, al jugar de forma moderada, se elevan las funciones cognitivas, como el pensamiento crítico, el razonamiento y el procesamiento del lenguaje, mientras crece el espesor de la corteza cerebral.
· También, Robert Stickgold, uno de los investigadores psiquiátricos más importantes de la Universidad de Harvard, relacionó al efecto Tetris con la memoria motriz.
· Asimismo, científicos de la Universidad de Oxford informaron que este juego interrumpe los recuerdos que la memoria conserva, como visiones y sonidos experimentados en situaciones traumáticas.
· Además, otros estudios anunciaron que mejora la capacidad de la memoria y tiene efectos positivos en tres áreas de las habilidades espaciales (rotación, percepción y visualización).
Dicho esto, el efecto Tetris es un término tan reconocido, que ahora es utilizado para describir cualquier fenómeno en el que la mente de una persona, que dedica mucho tiempo y atención a una actividad, de inmediato recopila y modela esa actividad en vívidas imágenes mentales y sueños.
De igual forma, se utiliza como punto de partida, para explicar por qué los niños a menudo tienen pesadillas después de ver una película de terror, o por qué es probable que soñemos con algún videojuego si lo jugamos de manera constante; en ese caso, es frecuente que integremos a nuestros sueños la música del videojuego, o bien, que veamos imágenes proyectadas, a través de nuestros recuerdos subconscientes.
Es por eso que algunos expertos lo describen como un proceso de creación, que profundiza en el subconsciente, alterando ligeramente nuestra percepción de la realidad durante un corto período de tiempo, el cual, muy a menudo nos atrapa en nuestro estado más vulnerable, justo en el momento en que nos dormimos.
A saber, el fenómeno de transferencia del juego (GTP, por sus siglas en inglés), actualmente estudia al efecto Tetris, así como a la interacción con imágenes digitales y la simulación.
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