El desarrollo cerebral es un proceso de alta complejidad, ya que dicho órgano se encarga de recibir y enviar señales a los diferentes órganos del cuerpo, para asegurar las funciones y el control del organismo. De igual forma, es responsable de diversos procesos cognitivos, como el pensamiento, la memoria, las emociones y el lenguaje, por lo que consume más del 20 % de la energía total del cuerpo.
Por ello, es importante enfatizar que la salud cerebral es parte integral de un proceso en el que el ejercicio, el sueño, la actividad intelectual y social son trascendentes para el bienestar biopsicosocial completo; sin dejar de mencionar el papel importante de una buena nutrición.
La alimentación es clave para el cerebro, ya que puede potenciar su funcionamiento. Por ejemplo, una dieta rica en antioxidantes y grasas saludables es fundamental para que las células cerebrales tengan conexiones sinápticas adecuadas.
De tal manera que tener una alimentación saludable influye en la buena actividad y energía del cerebro, en la capacidad de memoria y concentración, así como en el estado de ánimo y en el menor riesgo de presentar enfermedades degenerativas del sistema nervioso.
Generalmente, la glucosa que proviene de los alimentos funciona como el combustible del cerebro, mientras que los carbohidratos, las proteínas y los lípidos participan de forma activa en la generación y eficiencia de las neuronas y algunos neurotransmisores.
Estos son algunos alimentos que nutren el cerebro y benefician la actividad neuronal:
· Avena: Rica en vitamina B1, combate la fatiga intelectual, el nerviosismo y el estrés.
· Pescado: Es rico en omega 3, calcio, potasio y hierro. Favorece el flujo de información cerebral y, por lo tanto, la buena memoria.
· Huevo: Rico en proteína. Favorece el envío de las señales cerebrales y previene la degeneración neuronal.
· Fresas: Ricas en antioxidantes. Estimulan la memoria y favorecen la supervivencia neuronal.
· Nueces: Aportan ácidos grasos omega 3 y omega 6, vitamina B6, vitamina E y potasio. Son grandes alimentos para el cerebro, pues mejoran el rendimiento intelectual.
· Almendras: Ricas en potasio, hierro, calcio, vitamina E y complejo B. Funcionan como antidepresivo, además de mejorar la memoria.
· Jitomate: Rico en antioxidantes. Previene enfermedades neurodegenerativas.
· Aguacate: Contiene magnesio, vitamina E, complejo B y ácidos grasos monoinsaturados. Controla y regula el riego sanguíneo y previene enfermedades neurodegenerativas.
· Vegetales de hoja verde: Aportan hierro y magnesio. Ayudan a evitar el deterioro cognitivo.
· Arándanos y frutos rojos: Ricos en flavonoides. Mejoran las conexiones neuronales y previenen de enfermedades neurodegenerativas.
· Cacao: Rico en flavonoides y antioxidantes. Mejora los procesos de memoria y aprendizaje.
· Chía y linaza: Son ricas en omega 3. Disminuyen el riesgo de presentar accidentes cerebrovasculares.
Por otro lado, existen bebidas que, igualmente, ayudan a que el cerebro tenga un funcionamiento adecuado; después de todo, este órgano no sólo necesita nutrientes sólidos, sino, también, líquidos.
Al igual que los músculos y los riñones, el cerebro necesita más concentración de agua que el resto del cuerpo, por lo que es necesario que se ingieran dos litros al día, ya que, cuando no se toma la suficiente cantidad, es probable que bajen los reflejos o, incluso, la capacidad de concentración puede verse afectada.
Hay algunas infusiones que, también, pueden favorecer al buen funcionamiento cerebral, como las de tomillo, ya que éste contiene una sustancia llamada apigenina, que fortalece las conexiones interneuronales y que es importante para mantener el cerebro joven; las de menta, que ayudan a incrementar la concentración y la memoria a largo plazo; las de manzanilla y las de salvia, que mejoran las funciones neurológicas; y las de ginseng, que potencian las capacidades de respuesta, estimulan la memoria y evitan el deterioro cerebral.
El té verde ayuda a incrementar la memoria y la concentración, ya que contiene L-teanina, compuesto importante para las funciones cerebrales. El café es un estimulante que inhibe los receptores de adenosina del cerebro, provocando que estemos más despiertos; una taza de café mejora la concentración, el tiempo de reacción y la memoria.
El jugo de naranja es rico en vitamina C, la cual es importante para aumentar la atención y el desarrollo del lenguaje, además de ofrecer beneficios neuroprotectores. El jugo de arándanos posee funciones antioxidantes, que favorecen el rendimiento cerebral, ya que mejoran la memoria a corto y largo plazo.
La leche de cúrcuma es otra bebida reconocida, que tiene beneficios antiinflamatorios y antidepresivos, además de que posee altos niveles de curcumina, la cual es un antioxidante natural capaz de incrementar la producción del factor neurotrófico que incrementa la función cognitiva.
El kéfir, una bebida probiótica, de consistencia similar al yogur, que se fermenta a través de la acción de un conjunto de levaduras y lactobacilos, destaca por su alto contenido en probióticos, produciendo un crecimiento importante de bacterias que ayudan al desarrollo tanto cerebral como intestinal.
Si quiere mantener su cerebro saludable, comience a incluir estos alimentos y bebidas en su dieta.
Bình luận